La historia del palazzo pamphilj
eitch borromini
El edificio que alberga el actual Hostel Eitch Borromini es el 'Collegio Inocenciano' del siglo XVII que se encuentra en un área relevante para la evidencia arqueológica. La zona de Plaza Navona, en la época romana, estaba ocupada por el estadio construido por el emperador Domiciano en el 86 d. C., una imponente elíptica de travertino que durante casi cuatro siglos ha sido sede de competiciones deportivas. Después del siglo V, el estadio gradualmente cayó en mal estado, pero su arena, conocida como Campus Agonis (Campo de Juegos), continuó organizando atracciones, fiestas y espectáculos de todo tipo. La presencia del estadio en los siglos posteriores determinó la morfología del área que con el tiempo vio surgir, en especial desde el siglo XV, palacios señoriales de familias ilustres romanas. En la primera mitad del siglo XVII, el conjunto de edificios que rodeaban la plaza se enriqueció con nuevos elementos arquitectónicos prestigiosos, incluida la construcción de la familia Pamphilj.
Las características del edificio
El proyecto fue encomendado a Francesco Borromini, genio absoluto de la arquitectura barroca y muy apreciado por el Papa, que lo quiso en su corte. Borromini comenzó las obras en 1654, planificando una estructura de plano cuadrado que se extendía entre via di Santa Maria dell'Anima y via di Sant'Agnese in Agone con vistas a Plaza Navona y caracterizada por un fuerte verticalismo.
El palacio de Eitch Borromini se extiende a lo largo de seis pisos, limita con la sacristía de la iglesia de Santa Inés en Agonía y termina con una magnífica terraza que ofrece al visitante una de las vistas más hermosas de Roma. El interior posee una distribución de los espacios simple y repetitiva, de acuerdo con los cánones de edificación colegial. La zona hotelera se localiza desde la segunda planta en adelante, mientras que en la primera se encuentra la biblioteca privada de los Pamphilj, famosa por la cantidad y rareza de los volúmenes y manuscritos y por el fresco de la bóveda realizado por Francesco Cozza. El Colegio tenía tres entradas con tres escaleras, de entre ellas la escalera de caracol original de Borromini, que aún se puede utilizar.
La fachada principal, hermana de la del Palazzo Pamphili, da hacia Plaza Navona y se caracteriza por una elegante serliana (ventana trífora) que recuerda a la del patio interior. Inocencio X murió en 1655, sin ver completado el trabajo de Borromini. Este se completó alrededor de 1658 por su sobrino Camillo, hijo de Olimpia Maidalchini quien, según la tradición, habría sido la verdadera promotora del Colegio y que, además, instó a que se construyeran pasajes y lugares secretos dentro del edificio, aún visitables, utilizados parar sus encuentros con el papa. La construcción del Collegio Innocenziano contribuyó así a que la Plaza Navona adquiriera el nombre de "Isla Pamphilj", un magnífico testimonio de la arquitectura barroca y del poder de la familia.